01 febrero, 2010

Nadie gana – Jack Black

Este post fue enviado por Daniel Ortiz a gclibros@yahoo.com. Daniel es editor de Ediciones Escalera, y nos presenta su última obra publicada. Muchas gracias Daniel.

Nadie gana, la novela autobiográfica con la que Jack Black retrató el submundo estadounidense paralelo a los felices años 20.

William S. Burroughs nunca escondió que se trataba del libro que más le había influido en su vida.

Publicada en Estados Unidos en 1926, esta joya literaria viene rescatada ahora de la mano de Ediciones Escalera y prologada por el propio Burroughs.

Nadie gana es la novela autobiográfica de Jack Black. En ella cuenta su singladura a través del mundo de la indigencia y la mendicidad, su deambular a la deriva como polizón en trenes de mercancías, sus peripecias picarescas por los polvorientos caminos de una Norteamérica que se ocultaba tras los bastidores de los felices años veinte.

Publicada en 1926, se convirtió en un revolucionario éxito de ventas, del que se harían eco generaciones posteriores de lectores y autores, como William S. Burroughs, quien ensalza el libro de Black en numerosas ocasiones en su obra cumbre, Junkie.

El mismo Burroughs escribiría para la reedición de AK Press de 1963 una introducción que Ediciones Escalera ha incorporado en la primera edición de la obra en castellano.

Jack Black nació en 1881 en Vancouver, pero se crió desde muy pequeño en Missouri. No tardó en convertirse en vagabundo y ganarse la vida como ladrón profesional en el ocaso del Salvaje Oeste. Escribió su autobiografía, Nadie gana (You can't win, McMillan, 1926), memorias o bosquejos (de ahí su influencia en Burroughs) de la existencia en la carretera de un honorable forajido, escritas a modo de manual anticriminal en el que insta a los delincuentes a tomar el camino recto, no sin arremeter contra la ineficacia del sistema penitenciario y la justicia penal, a los que hace constante alusión, incluso desde el propio título.

Black escribe desde la experiencia adquirida a lo largo de veinte años viajando por todo Estados Unidos y Canadá, ganándose la vida como ladrón y estafador, si bien su figura es esencialmente anónima (dudándose hasta el día de hoy de su verdadero nombre e identidad). Pese a que su filosofía de vida fuera de especial influencia en William S. Burroughs, la sombra de su obra se proyectó también en los demás autores de la Generación Beat. Se dice que su última etapa en la cárcel, Black entabló amistad con Fremont Older, quien lo contrató para trabajar en su periódico, el San Francisco Call. Allí trabajaba en su autobiografía con Rose Wilder Lane, y componía artículos en su mayor parte concernientes a la reforma penitenciaria. Se rumorea también que recibía por entonces un estipendio de 150 dólares semanales para escribir junto a Bessie Beatty, una obra de teatro titulada Salt Chunk Mary, basada en uno de los personajes de su autobiografía y que nunca vería la luz.

Se cree que se suicidó en 1932, arrojándose a las aguas del Puerto de Nueva York.

Muchas gracias Daniel. Esperamos que tengan éxitos.

Saludos!

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